El fiscal del condado de Kings, Phil Esbenshade, declaró que Jaime Osuna, de 31 años, cortó varias partes del cuerpo de Luis Romero, incluyendo un ojo y un dedo, usando un “objeto metálico afilado envuelto en una cuerda y atado a un mango”.
Se cree que la víctima “estuvo consciente durante una parte del tiempo”, por lo que Esbenshade calificó el crimen como “el caso más espantoso que he visto en términos de atrocidad”.
Las autoridades declararon que Romero, de 44 años, murió desangrado debido a “múltiples traumatismos de fuerza aguda”.
SE DECLARA INOCENTE
Osuna se ha declarado inocente del asesinato Romero y de otros cargos, incluidos tortura y posesión de armas en una institución de custodia, en su primera comparecencia ante el tribunal.
En caso de que el reo sea declarado culpable, podría ser sentenciado a pena de muerte. Osuna ya está cumpliendo cadena perpetua sin derecho a libertad condicional, por el asesinato de Yvette Pena en el 2011.
Osuna ha sido trasladado a una prisión para reos que necesitan atención médica o de salud mental. Se informó también que el preso regresará a la corte a fines de junio para una audiencia preliminar.
Anteriormente, el convicto había declarado que no era la primera vez que ha cometido “actos abominables” y que tenía intenciones crueles desde niño.